llevo dos siglos con el hambre de los itinerarios fingidos, pero a quién preocupa el desdén de gentes insalvables ya, parece que el aspecto imposible solo revela el plan de sobrevivir en un ascensor o no gastar en el carrefur.
no puedo saber nada más de que quieras confiar en sobrevivir, sé que no es verdad, desde jamás y a partir de ayer dejo todo a lo que debe consistir, a por qué decido así.
quiero golpear cosas y quiero pensar, estoy educado así,
lo que en realidad me da igual y no me deja entrar en razón,
reescribiendo el perdón pedido demasiadas veces, sin una salida fiel a la decadencia consabida, impregnado en la anestesia de mi memoria en la que quise esquivar la locura de uno de esos finales absurdos y es justo todo lo contrario quien insiste en quedarse como real.
y tú,
cuando dices será y así te daré a eleguir, tú, lo que nunca pensé que perdiera en mí y te perdí. tú que no miras el cielo y todo es razonable, que no puedes pensar si la luna lo intentó y no pudo escapar del veneno de la puta gravedad, sin sentir, sin vivir, desangrada hasta no sentir.
con ganas de otra vez con aburrimiento siendo muy tarde con nombres que se volveran contra lo hecho hecho está sin llorar y con una oración:
"tu le querrás o será que no recuerdas bien, solía morir en segundos que le pedían para ser, pero ya de muy pequeño, y así siguió, y así siguió, por qué le dejas caer por una habitación, tan bien que vió lo hermoso del gris, y nunca sabrá la razón de porque permanece tan fiel, hundiendose hasta que cree que fue en abril cuando algo se borró, y un día decidió reir y cantó un adiós a todo el principio para poder empezar otra vez"
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